Desde el caserío San Martín de Mallabia, se ha iniciado un interesante proyecto de gestión forestal sostenible con 9 especies de frondosas autóctonas, de la mano de Keko Alonso. Una alternativa al monocultivo, donde no se maltrata a la tierra y se apuesta por la biodiversidad. Una iniciativa valiente en un pueblo pequeño como el nuestro, a la que doy todo mi apoyo. Es indudable que es el único camino a seguir, ya hemos visto a lo que nos ha llevado el monocultivo del pino, y como la industria maderera nos lleva al desastre del eucalipto, al final, todos tendremos que ir a la gestión sostenible con árboles autóctonos que mantengan el suelo y la gestión del agua como lo han hecho durante miles de años.
"Uno de los retos principales que nos plantea este siglo XXI a la especie humana es dejar de explotar, renunciar a dominar los ecosistemas para volver a formar parte de ellos.
Es prioritario que entendamos la importancia de todos sus componentes, que nos sintamos uno más de entre todos ellos y que conozcamos los procesos naturales que rigen los ecosistemas naturales, para poder gestionarlos desde esta perspectiva.
Este es el punto de partida del trabajo de Besaia."
Con éste texto iniciamos el recorrido por la web de Besaia,, http://besaia.com/ un proyecto desarrollado por Keko Alonso (biólogo) y que tiene su base de operaciones en Larrabetzu (Bizkaia).
En su página web se puede leer en el apartado de alternativas forestales:
"Ante la realidad forestal de nuestro territorio, dominada por los monocultivos de especies exóticas, apostamos por la diversificación. Y apostamos por una ordenación territorial que tenga en cuenta los diversos usos de la tierra y que apueste decididamente por los Bosques de Conservación y por alternativas productivas, como son los Bosques Productores de Madera de Calidad Cercanos a la Naturaleza.
Los primeros, los Bosques de Conservación (BC), son masas forestales que evolucionan libremente; mientras los segundos, los Bosques Productores Cercanos a la Naturaleza (BPCN), son masas cercanas al bosque potencial, diseñadas y gestionadas para producir madera de calidad, aprovechando los procesos que tienen lugar en el ecosistema forestal.
Con este tipo de masas, podemos superar los problemas observados en la “Era de los monocultivos”, en relación con la alteración de los suelos, la reducción de la biodiversidad, la rentabilidad a lo largo del tiempo, etc. Para lograrlo, tan importante como el hecho de trabajar con las especies autóctonas, es el método de cosecha: en los BPCN cosechamos mediante métodos que evitan las talas totales de grandes superficies."
Ya están plantados mas de tres mil árboles, de nueve especies diferentes, todos ellos de frondosas autóctonas, que darán algo de color al monótono paisaje de Mallabia, dominado por el pino radiata y por las nuevas plantaciones de eucalipto, algo de esperanza para las futuras generaciones y un claro ejemplo a seguir. Desde aquí quiero dar mi más efusiva felicitación al caserio San Martín de Mallabia, por dar esperanza a las futuras generaciones de nuestro pueblo.
